Dormir ha pasado a la historia en Ciudad Resurrección. Gracias a un
sofisticado proceso que se creó durante la guerra, ya nadie malgasta
ocho horas diarias en el descanso. Pero el cerebro humano sigue
necesitando soñar. Por eso, una red controlada por el Gobierno elabora
sueños artificiales, según las necesidades del inconsciente de cada
individuo, con el fin de poner a punto la mente en pocos minutos.
Solo hay una manera de averiguarlo: adentrarse en el mundo onírico,
donde no sirven las leyes de la lógica y la imaginación es la única vía
para sobrevivir.
«Con una ambientación propia de nuestras peores pesadillas, un toque distópico y unas pinceladas de fantasía, Campbell y Cotrina nos presentan una novela fascinante que nos invita a seguir soñando.»
Una misteriosa joven aparece en los sueños de dos chicos muy
diferentes: Ismael es el hijo de un artesano onírico clandestino de los
suburbios; Anna es una privilegiada que vive en las alturas de la
ciudad, hija de una importante burócrata. La joven les suplica que la
salven, que la liberen de la oscuridad. Anna e Ismael se sienten
inmediatamente atraídos por ella, y pronto descubren que no han sido los
únicos que han recibido esas enigmáticas visitas. Pero ¿existe esa
chica en el mundo real?
«Con una ambientación propia de nuestras peores pesadillas, un toque distópico y unas pinceladas de fantasía, Campbell y Cotrina nos presentan una novela fascinante que nos invita a seguir soñando.»
Hermochi, Más Allá de las Palabras
«Espeluznante, paranoico e imaginativo. Los autores nos sumergen en un
mundo donde el horror y la fascinación van de la mano. A Freddy Krueger
le ha salido un competidor.»
Estefanía Moreno, El Templo de las Mil Puertas
«El fin de los sueños es una novela retorcida, oscura,como las
peores pesadillas, pero también cargada de esperanza y de esa luz que
baña los sueños. Cuidado: quizá temas volver a dormir.»
Paula Navarro, Equinoccio
No hay comentarios:
Publicar un comentario